Cortar el pollo en dados de 2 cm aproximadamente y agregar sal y pimienta.
Mezclar en un tazón con ayuda de un tenedor el huevo con la leche y la mostaza. Sazonar con sal y pimienta.
Colocar en un plato grande la harina junto con la fécula y mezclar hasta integrar. Colocar una olla mediana a fuego medio con suficiente aceite para freír.
Tomar las piezas de pollo y pasarlas primero por la mezcla de huevo y después por la harina. Así hasta que tengamos todas las piezas cubiertas.
Una vez que el aceite esté caliente para freír (180° C) agregar de 7-8 piezas de pollo y cocinar durante 5 minutos hasta que estén doradas. Colocar el pollo listo en un plato con papel secante para quitar el exceso de aceite.
Repetir el proceso con todo el pollo hasta que esté listo.
Para la salsa y el terminado:
Cortar la parte blanca de la cebolleta en dados pequeños y la parte verde en rodajas que servirán para decorar.
Colocar una sartén a fuego medio con un poco de aceite, agregar la parte blanca de la cebolleta y cocinar durante 3 minutos hasta que se ablande.
Aparte, en un tazón mezclar todos los ingredientes de la salsa hasta que estén bien integrados. Añadir la salsa a la sartén con la cebolleta y cocinar por 4-5 minutos hasta que se espese un poco.
Agregar el pollo a la sartén y mezclar hasta que se impregne de toda la salsa. Retirar de la sartén y servir con semillas de sésamo por encima y cebolleta.