1taza (225 gr)mantequilla sin sal,a temperatura ambiente
3/4taza (150 gr)azúcar granulado
3/4taza (150 gr)azúcar moreno
2huevos grandes
2cdita (10 ml)extracto de vainilla
La ralladura de 1 naranja
2taza (340 gr)chispas de chocolate blanco
1taza (140 gr)arándanos deshidratados
Instructions
En un tazón mediano tamizar la harina con el bicarbonato de sodio, sal y reservar hasta que se necesite.
En un tazón grande, acremar con la batidora eléctrica la mantequilla con los dos tipos de azúcar por 3 minutos hasta obtener una mezcla más clara y esponjosa.
Añadir los huevos junto con el extracto de vainilla, ralladura de naranja y batir por 1 minuto más hasta que todo se integre bien.
Agregar la mezcla de la harina e integrar con una espátula de goma hasta obtener una masa suave. Añadir las chispas de chocolate con los arándanos e integrar con la misma espátula hasta que estén incorporadas en toda la masa. Se pueden dejar un poco de chispas de chocolate y arándanos para colocarlos en las galletas previo al horneado.
Envolver la masa con papel film de cocina y refrigerar por un mínimo de 2 horas o hasta toda la noche.
Una vez que pasó el tiempo de reposo, precalentar el horno a 180° C y colocar papel de horno en una bandeja grande.
Porcionar la masa en 30 bolitas del tamaño de 2 cucharadas cada una y colocarlas en la bandeja separadas al menos 5 cm entre sí ya que se esparcen mucho al hornearse. Agregar el resto de chispas de chocolate y arándanos encima de cada galleta si así se desea.
Hornear las galletas por 10-12 minutos hasta que se vean firmes y ligeramente doradas en los bordes pero no del todo en el centro. Retirarlas del horno y dejarlas enfriar por completo en una rejilla.
Las galletas se pueden guardar perfectamente en tupper bien cerrado por hasta 1 semana.