1/2taza + 1 cda (125 gr)mantequilla sin sal, fría y cortada en dados
2yemas de huevo
1/2cdita (2.5 gr)extracto de vainilla
La ralladura de 1/2 limón
Para el relleno y las fresas:
1 3/4taza + 2 cdas (450 ml)leche entera
Las semillas de vaina de vainilla o 2 cditas (10 ml) extracto de vainilla
2/3taza (133 gr)azúcar blanco
1/4cdita (1.2 gr)sal
La ralladura de 1 limón
4yemas de huevo grandes
1/3taza (50 gr)fécula de maíz
3cdas (45 gr)mantequilla sin sal
3/4taza (170 gr)queso crema, a temperatura ambiente
600grfresas frescas, lavadas y cortadas en rodajas
1cda (15 ml)agua para el almíbar
1/4taza (50 gr)azúcar blanco para el almíbar
Instructions
Para la masa:
En un procesador de alimentos colocar la harina, azúcar, sal y procesar por unos segundos hasta combinar. También se puede hacer en un bol mezclando con un tenedor.
Agregar la mantequilla y procesar por 10 segundos hasta que se forme un arenado (se puede formar el arenado igualmente con el tenedor o con las yemas de los dedos).
Añadir las yemas de huevo con el extracto de vainilla, ralladura de limón y procesar (o combinar con las manos) hasta formar una masa suave (es importante no amasar en exceso).
Envolver la masa en papel film y dejarla reposar en el refrigerador por 30 minutos.
Precalentar el horno a 180° C y, una vez que la masa ya reposó, sacarla del refrigerador y estirarla en una superficie limpia y enharinada hasta que tenga un grosor de unos 5 mm.
Colocar la masa estirada en un molde para pay de 25 cm de diámetro previamente engrasado y acomodarla de manera que cubra todo el interior del molde, haciendo algunas decoraciones en los bordes si se desea.
Cubrir la masa con papel mantequilla o papel aluminio y colocarle encima algo que haga peso para que mantenga su forma. Se pueden utilizar granos de frijol, garbanzo, arroz, etc.
Hornear a 180° C por 20 minutos, después retirarle el papel mantequilla o aluminio y hornearla por 15-20 minutos más hasta que esté totalmente cocida y ligeramente dorada. Retirarla del horno y dejar reposar la base de la tarta hasta que se necesite.
Para el relleno y las fresas:
Con un cuchillo bien filoso, abrir a lo largo la vaina de vainilla y con cuidado retirar todas las semillas de su interior.
En una olla pequeña, colocar la leche con la mitad del azúcar, las semillas de la vaina de vainilla, la sal, la ralladura de limón y llevar a fuego medio-bajo, mezclando ocasionalmente con un batidor globo de mano.
En un bol mediano, mezclar con un tenedor el resto del azúcar con las yemas y la fécula de maíz hasta obtener una mezcla homogénea. Agregar un poco de la mezcla de leche caliente y batir con el mismo tenedor para que esta mezcla de yemas se tempere.
Vaciar la mezcla de yemas a la olla con la leche y cocinar a fuego medio por 4-5 minutos aproximadamente, sin dejar de batir con el globo de mano, hasta que se forme una crema más espesa, sin llegar a quemarse.
Retirar la crema del fuego, añadir la mantequilla y batir hasta que quede bien integrada. Vaciar la crema pastelera en otro tazón limpio, cubrirlo con papel film (que debe tocar la superficie de la crema para que no se forme costra) y refrigerar por 30 minutos.
Colocar el queso crema en un bol grande y batir con un batidor globo de mano o batidora eléctrica por 2 minutos hasta que esté suave. Agregar con cuidado la crema pastelera, batir por 30 segundos más hasta obtener una mezcla homogénea y volver a refrigerar por 30 minutos.
Tomar la base de la tarta y vaciarle con cuidado todo el relleno que ya debe estar bien frío. Esparcirlo uniformemente con una espátula de goma.
Agregar encima las fresas acomodándolas a modo de abanico hasta que el relleno esté totalmente cubierto.
Colocar en una olla pequeña el agua con el azúcar y llevar a fuego medio-alto por unos minutos hasta que hierva y se forme un almíbar espeso.
Barnizar usando una brocha de cocina las fresas con el almíbar (una vez que no esté hirviendo) para que luzcan mejor y refrigerar la tarta por al menos 2 horas antes de comer.