Precalentar el horno a 180° C. Colocar papel mantequilla en un molde hondo rectangular de 30cm x 13cm aproximadamente.
En un bol mediano tamizar la harina con el polvo para hornear y la sal.
En un bol grande, batir los huevos junto con el azúcar con una batidora eléctrica o globo de mano por 5 minutos hasta que la mezcla se aclare y triplique su tamaño.
Añadir con cuidado y sin dejar de batir, el yogur, aceite, jugo de limón, ralladura de limón y extracto de vainilla. Batir por 30 segundos hasta que todo se mezcle bien.
Agregar la mezcla de la harina en tres adiciones. Batir solo por máximo 30 segundos después de cada adición, solo hasta que los ingredientes se integren para no sobre batir.
Incorporar las semillas de amapola y batir solo hasta que se integren y se obtenga una mezcla suave y homogénea.
Vaciar la mezcla en el molde y hornear a 180° C por 45-50 minutos aproximadamente hasta que al insertar un palillo de madera este salga limpio.
Una vez listo, retirar el bizcocho del horno y dejar enfriar en el molde por 10 minutos. Después, desmoldarlo y dejarlo enfriar por completo en una rejilla.