3/4taza (170 gr)mantequilla sin sal,a temperatura ambiente
3/4taza (150 gr)azúcar blanco
1huevo grande
1cdita (5 ml)extracto de vainilla
Instructions
En un tazón mediano tamizar la harina junto con el polvo de hornear y la sal.
En un tazón grande con la batidora eléctrica, acremar la mantequilla con el azúcar por 3 minutos hasta obtener una mezcla más clara y esponjosa.
Agregar el huevo, la vainilla y batir por 1 minuto más hasta integrar.
Añadir la mezcla de la harina y mezclar con una espátula de goma hasta que se forme una masa suave que no se pegue en las manos.
Dividir la masa en dos partes iguales y colocar cada una en una superficie limpia con un poco de harina. Estirar cada porción de masa con un rodillo (sin importar la forma) hasta que tenga un grosor de 6 mm.
Colocar las dos masas estiradas en un molde con papel de horno debajo y cubrirlas cada una con más papel de horno y papel film para que no se sequen. Refrigerarlas por al menos 1 hora o hasta por 2 días.
Una vez que las masas estiradas se hayan refrigerado, precalentar el horno a 180° C y colocar papel de horno en 2 bandejas grandes (pueden ser las mismas donde se refrigeraron las masas).
Colocar las masa estiradas en una superficie limpia con un poco de harina y cortarlas con un cortador de la forma que se prefiera, puede ser de forma circular, de corazón, de estrella, etc. Tomar la masa que haya sobrado, estirarla y cortarla de nuevo.
Una vez que se tengan todas las galletas cortadas, colocarlas en las bandejas con papel de horno (separadas 3 cm entre sí) y hornearlas durante 12 minutos hasta que estén ligeramente doradas.
Una vez que se hayan horneado las galletas, dejarlas enfriar por 10 minutos en un rejilla antes de decorarlas de la manera que se prefiera con royal icing o betún de mantequilla.
Las galletas deben guardarse en un tupper bien cerrado para que duren 5 días a temperatura ambiente o hasta 10 días en el refrigerador.