Estos scones de cereza son perfectos para este verano. Las cerezas, ahora mismo, están de temporada en muchas partes del mundo, así que hacer un postre, o “treat” con ellas, es ideal.
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Los scones son un pan o bizcocho originario de Inglaterra. Es un bizcocho muy simple y rápido de hacer. Se hace con trozos de mantequilla muy frios, que deben mantenerse frios durante la preparación. La idea, es que estos trozos de mantequilla, cuando se cocine todo, formen capitas, que hagan que la masa se deshaga y quede quebradiza, pero a la vez suave.
Estas capas, cuando se hace bien, quedan riquísimas! le dan una textura particular a los scones, que los diferencia de muchas otras recetas. Por encima, quedan con una capa crujiente que es irresistible.
Ahora, el hecho de agregar cerezas, o cualquier fruta a una receta como esta hace que queden mucho más húmedos, y con mucho más sabor. La crema agria, o nata, hace que queden también con una textura más densa, y gruesa, de alguna forma. Este ingrediente es una parte clave de la receta.
Por lo demás, es una receta muy fácil de hacer y que tiene mucho encanto por si sola.
A mi los scones, siempre me recuerdan a la hora del té, o la merienda, o la hora de un snack. Pero también me recuerdan siempre a un desayuno, o un brunch. Y es que lo mejor con los scones, y más estos, es comérselos justo cuando salen del horno, que siguen hasta un poco calientes, porque es cuando mejor saben. Además, no se mantienen muy bien con el paso de los días, porque llevan crema, y con las cerezas hace que duren muy poco tiempo sin cambiar su sabor y textura, así que hay que aprovechar cuando estan crujientes y riquísimos!
Si te gusta esta receta tienes que ir a ver nuestros scones de calabaza, que te vas a enamorar!
Scones de cereza
Ingredients
- 2 1/2 tazas (325 gr) harina de trigo de todo uso
- 1/3 taza (66 gr) azúcar blanco
- 1 cda (14 gr) polvo para hornear
- 1/2 cdita (2.5 gr) sal
- 2 cditas ralladura de limón o lima
- 6 cdas (90 gr) mantequilla sin sal, muy fría y cortada en cubos pequeños
- 3/4 taza (180 gr) crema agria
- 1 cdita (5 ml) extracto de vainilla
- 1/2 cdita (2.5 ml) extracto de almendra (opcional)
- 1 1/2 tazas cerezas frescas, sin hueso y cortadas en 4 porciones
- 3 cdas (45 gr) crema agria, para barnizar
Instructions
- Precalentar el horno a 220° C. Colocar papel de horno en una bandeja rectangular grande.
- En un bol grande agregar la harina con el azúcar, polvo de hornear, sal, ralladura de limón y mezclar muy bien todo con una cuchara.
- Agregar la mantequilla fría e integrarla con las yemas de los dedos o con un tenedor hasta formar una masa arenada. Esto debe hacerse rápido para que la mantequilla mantenga su temperatura fría (este paso también puede realizarse en un procesador de alimentos). Colocar este bol con la masa arenada en el congelador por 10 minutos.
- Mientras, en otro bol mediano agregar la crema agria con el extracto de vainilla y el extracto de almendra. Mezclar muy bien con una cuchara hasta que todo se integre perfectamente.
- Sacar el bol del congelador y añadirle la mezcla de la crema agria. Mezclar con una espátula de goma hasta que comience a formarse una masa que no se unirá del todo. Agregar las cerezas y amasar un poco la masa solo hasta que las cerezas se integren pero es importante no amasar en exceso.
- Colocar la masa en la mesada limpia y enharinada y con ayuda de las manos formar un círculo de 3-4 cm de grosor aproximadamente. Con un cuchillo o un cortador de masa, cortar el círculo por la mitad y después cada mitad cortarla en cuartos para obtener 8 triángulos de masa en total.
- Colocar los scones en la bandeja de horno, separados entre sí para que no se peguen al hornearse y barnizarlos con crema agria con ayuda de una brocha de cocina.
- Hornear los scones a 220° C durante 18-20 minutos hasta que las orillas se vean doradas. Una ves listos, retirarlos del horno y dejarlos enfriar por 10 minutos antes de consumir.
